DECIMAS DE LA BIBLIA CON CITAS
Por: Secundino
Sugasti V.
Eh aquí a mi humilde entender,
lo que la Biblia nos dice
Dios con ella nos bendice
si la sabemos leer.
Tan sólo quiero exponer
lo que logre meditando
para que vaya incitando
a muchos a escudriñar.
Con mi yerro o mi acertar
mi objetivo iré logrando.
Por concepción milagrosa Is. 7, 14
los dos al mundo venían; Lc. 1, 5 - 25
Juan y Jesús que traían, Mt. 1, 18 - 25
¡Una misión tan hermosa!
¡Es una escena gloriosa!
Dos seres en gestación, Lc. 1, 39 - 48
tenían comunicación
estando en el vientre aún.
Venían con misión común: Jn.1, 6 - 8
¡Traernos la salvación!
Juan en el reino es pequeño.
¡El grande entre los nacidos!
No está entre los escogidos Lc. 7, 28
para ser del reino dueño. Lc. 16, 16
No entraba en su desempeño
ese reino administrar.
Él lo vino a proclamar Mal. 3, 1
Y los otros, a formarlo.
Una cosa es anunciarlo
¡Y otra es en él estar! Mt. 11, 11 - 15
Porque no hace, o porque hace Mt. 9, 14
siempre suelen criticar; Mt. 3, 4
por abstemio, o por tomar,
nunca falta quien rechace. Mt. 11, 16 - 19
A todos, nadie complace
pero El, que vino a servir,
intentaba convivir Mt. 9, 10 - 11
para enseñar lo perfecto.
Y les parecía incorrecto, Lc. 15, 1
cada modo de vivir.
Que Juan como un nuevo Elías Mt. 17, 10 - 13
tenía que venir, y vino. Jn. 1, 17. Mal. 3, 23
Portador de igual destino, Mt. 11, 14
lo anuncian las profecías. Mc. 9, 11
También dicen que el Mesías
¡Tendrá mucho sufrimiento! Si. 48, 1
Y no hay arrepentimiento…
¡Hacia el cadalso, camina!
¡Con el amor elimina,
de su alma, el desaliento!
¡Hoy todo habla de alegría
en espera del Señor! So. 3, 14 - 18
¡Se espera paz y amor!
¡El nacer del nuevo día! Sal: Is. 12, 3 - 6
El profeta nos decía:
que las cosas cambiarán. Flp. 4, 4 - 7
Un mundo feliz, verán
porque el Rey, muy pronto viene.
Esto nadie lo detiene.
Lo anuncia el bautista Juan. Lc. 3, 10 – 18
Si estudiamos su ascendencia Mt. 1, 1 - 17
hay de todo: malo y bueno. Lc. 3, 23 - 38
Jesús desechó el veneno
Y guardó la sana esencia.
Con su humana inteligencia
tan sólo vino a ilustrar.
A enseñarnos a encontrar,
la semejanza perdida. Gén. 1, 26 - 27
Con su plena humana vida,
nos lo vino a demostrar.
Virginidad de María; Mt. 1, 18 - 25
de Jesucristo deidad; Lc. 1, 26 - 38
de José su gran bondad;
verdad de la profecía. Is. 7, 14
Las lecturas de este día
no nos permiten dudar.
Un Ángel le viene a dar
a María la fiel noticia:
¡Que en ella el rey de justicia, Jer. 23, 5 - 8
a este mundo, va a llegar!
Era anciano Zacarías.
Era estéril Isabel.
Por eso dudaba él,
de lo que el hombre decía.
Además, él no sabía
que era Ángel por Dios enviado.
Lo que tanto había esperado,
esta vez se le concede. Lc. 1, 5 - 25
¡Tal bondad, creer no puede!
Por dudar, fue castigado.
El Señor es mi pastor
por eso nada me falta. Sal. 23 adaptación al folklore
Está mi autoestima alta,
porque El es mi servidor.
No siento ningún temor,
porque siempre está conmigo.
El enfrenta a mi enemigo
y perfuma mi cabeza.
Es su casa mi dehesa
por largos días. ¡Lo bendigo!
Bendita entre las mujeres
dice Isabel a María Lc. 1 - 39 - 45
porque al mundo le daría,
¡El mayor de los placeres!
El saludo de dos seres
desde el vientre maternal,
está anunciando el final
de aquella bendita espera.
¡Un Dios que al mundo libera,
del pecado original! Gen. 3, 1 - 19
¡Para el mundo hay alegría
se aproxima el justo Rey! Is. 1, 24 - 28
Se anuncia para su grey, Is. 2, 1 - 8
¡El nacer de un nuevo día!
A Dios le canta María, Lc. 1, 46 - 56
plenamente agradecida
por haber sido escogida
para gestar en su ser,
al Rey que viene a traer,
¡La paz, por Dios prometida!
El cuerpo que Dios le dio
El lo pone a su servicio. Heb. 10, 1 - 10
Con un solo sacrificio,
a la creación redimió.
¡Con su sangre nos limpió
del pecado original!
Así le puso final
a lo que pedía la ley.
¡Por su holocausto su grey, Mi. 5, 1 - 4
hoy se libera del mal!
Igual que a Jesús, a Juan
fue Dios quien les puso nombre. Lc. 1, todo
Porque en la historia del hombre,
protagonismo tendrán.
Esto dice que serán
para algo grande escogidos.
Por Dios están decididos,
sus pasos en la creación:
¡Luchar por la redención,
De los que estamos perdidos!
Primero, palabra era. Jn. 1, 1 – 18
Y la palabra era Dios. Gen. 1,1
Hacen uno entre los dos. Ap. 19, 13
Ese Dios que el mundo espera. Pro. 8, 22
¡Si al llegar lo recibiera! Sab. 9, 1
¡Pero lo lleva a la cruz! 1 Jn. 2, 8
no hace presa de la luz.
Tiniebla, prefiere ser.
Quien quiere puede tener,
¡A Dios en El… (En Jesús!)
Jesús le vaticinó,
maltrato a sus seguidores. Mt. 10, 17 - 22
¡Tendrán que sufrir horrores! Mc. 13, 9
Esteban se resignó. Hch. 6, 8 – 10 7, 54 – 60
¡El pueblo lo asesinó,
en esa forma macabra!
El espera que se abra
El cielo en su día postrero.
¡Es Esteban el primero,
en morir por la palabra!
Jesús mismo lo anunció
y también la profecía: Jn. 20, 2 - 8
Cristo resucitaría. Lc. 24, 25 - 27
Pero nadie lo entendió.
Por eso los sorprendió
en el sepulcro, su ausencia.
Aquí estaba la evidencia,
del Mesías que se esperaba.
¡Y con esto comprobaba,
su total omnipotencia!
¡El defensor de este mundo
fue del mundo rechazado. Mt. 2, 13 - 18
De su patria desterrado, Mt. 2, 19
viviendo cual vagabundo!
Presa del celo profundo Jn. 7, 40 - 53
De la clase dominante. Jer. 31, 15
En su vida no hubo instante
De ocio y de tranquilidad.
¡La fatal adversidad,
Siempre anduvo por delante!
Quien pretende conocer 1 Jn. 2, 3 - 11
a Cristo y no lo obedece, Jn. 14,21
por más que a su Dios le rece,
en tiniebla está su ser. Jn. 12, 35
¿Quiere la luz poseer?
Obedézcale al Señor. Pro. 4, 18
Él nos pidió con fervor
al momento de partir:
su mandamiento vivir.
¡Mandamiento del amor! Jn. 13, 34
Obediencia por amor
hoy nos pide la palabra. Lc. 2, 41 - 52
Quien ama su gloria labra Sal. 127
y complace a su creador. Si. 3, 2 – 8 12 - 14
Pedir todo por favor
practicado en el hogar,
al servicio suele dar
viso de espontaneidad.
Y fiel reciprocidad, Col. 3, 12 - 21
la familia ha de adornar.
¡A partir de mi bautismo
paso a ser hijo de Dios! Jn. 1, 1 - 18
Porque he escuchado su voz,
he salido del abismo.
Aceptado por mi mismo
tan bello acontecimiento,
su hijo espiritual me siento. Gal. 3, 23 - 29
¡Como tal, logré nacer!
Mi bautismo vino a ser,
mi segundo nacimiento. Jn. 1, 12
Llegada la plenitud
de los tiempos Dios envía Gal. 4, 4 - 7
a su hijo que traía,
la mas celestial virtud! Lc. 2, 8 - 18
Con su inmensa beatitud
a todos diciendo está
que el gran tesoro nos da
plenamente satisfecho.
¡Donándonos el derecho,
De llamarle a Dios, papá!
Juan a Jesús conocía
pero no como el Cordero. Ap. 5, 6
Fue plenamente sincero. Mt. 8, 17
Expresó, lo que veía. Jn. 1 29 - 34
Por revelación sabía Mc.1, 7 - 11
que al espíritu iba a ver Jn.1,33
sobre el Mesías descender,
cuando fuera a bautizarlo.
Aquí pudo comprobarlo, Is. 42, 1
¡Y lo expresó con placer!
¿Dónde vives? Preguntaron.
Vengan y verán, les dijo. Jn. 1, 35 - 42
En un palacio. Corrijo.
¡Sólo humildad, encontraron!
Pero con El se quedaron;
no buscaban opulencia.
Sabían que la omnipotencia
en palacios, no habitaba. 2 Sam. 7, 1 - 11
El Mesías que se esperaba,
sería de su descendencia.
Jesús ve en Natanael
su total sinceridad Jn. 1, 43 - 51
y también la facultad,
para hacer apóstol, de El. Lc. 6, 12 - 16
A cada uno su papel: Mc. 3, 13 - 19
que podía desempeñar.
Judas para traicionar, Jn. 14, 27
Simón para sucederlo. Mt. 16, 18
Y así, podemos verlo,
su reinado organizar. Lc. 22, 29
Un mundo incomunicado
se entera de la llegada Mt. 2, 1 - 12
desde siglos anunciada,
¡Del Mesías tan esperado!
De tan lejos han llegado
a rendirle adoración Is. 60, 1 - 6
al Rey de la gran nación
que ha de ser el mundo entero.
En un aposento austero,
¡Le nace cual bendición! Ef. 3, 2 - 6
A este Jesús peregrino
Isaías había anunciado; Is. 8, 23
su itinerario marcado
Jesús tenía cuando vino. Mt. 4, 12 – 17. 23 - 25
Era la luz que el camino
a todos iba a alumbrar. Lc. 1, 79
La libertad recobrar
de israelitas y paganos.
Que todos somos hermanos,
El nos vino a demostrar.
Que Dios nos amó primero 1 Jn. 4, 7 - 10
portándonos bien, o mal
y a todos por igual,
al veraz, o al embustero.
Nos dio el universo entero,
con entero regocijo.
Sin méritos nos bendijo
sin importarle el pasado. Sal. 71
Para lavar el pecado,
¡Nos envió a su propio Hijo! Jn. 3, 16
Caminando sobre el mar…
Un fantasma puede ser. Mc. 6, 45 - 52
¿Cuánto milagro ha de hacer Mt. 14, 22
para esa fe despertar? Jn. 6, 16 - 21
Acaban de presenciar
el del pan multiplicado
y todo cuanto se ha dado
que comprueba su deidad.
Y con esta novedad,
su grupo, grita asustado.
Que presente está el Mesías Lc. 4, 14 - 22
fue su mensaje fecundo.
Va a liberar este mundo,
como lo dijo Isaías. Is. 61, 1
Se cumplen las profecías
que aquí acaban de escuchar. Lc. 21, 31
Que los cojos va a andar
y los ciegos van a ver.
He aquí, lo que vino a hacer,
Y lo van a rechazar. Mt. 13, 53 - 58
Al decir: si quiere, puede,
reconoce omnipotencia. Lc. 5, 12 - 16
Luego, pone en evidencia,
el bien que se le concede.
El, no ve bien que se quede,
sin este bien compartir.
Y comienza a difundir,
el milagro realizado. Mt. 8, 2
Aunque le habían ordenado,
que no lo debía decir. Mc. 1, 40 - 45
Según nos explica Juan,
no es igual todo pecado. 1 Jn. 5, 14 - 21
Hay quien puede ser salvado,
con la ayuda que le dan.
A Dios por él rogarán
si el pecado no es mortal Hb. 6, 4. 10,26
y se separa del mal
en virtud de su bautismo. Jn. 17, 15
Y se sale del abismo,
en su vida terrenal.
Siendo Dios, fue bautizado. Lc.3, 21
Con lo cual quiso decir:
que debemos recibir, Mt. 3, 13
el sacramento indicado. Mc. 1, 7 - 11
El espíritu ha bajado,
a decir, que así se hará.
Con nosotros estará,
lo dijo en aquel momento.
Quien reciba el sacramento,
a El mismo recibirá.
Dios habló por los profetas.
Hoy nos habla por su hijo. Heb. 1, 1 - 6
Quien se hizo crucifijo,
para darnos la receta.
Mostró la mejor faceta
haciendo bien, cuanto hizo.
A su Padre satisfizo,
cumpliendo con su destino.
Se convirtió en el camino, Jn. 14, 6
de llegar al paraíso.
Con Jesús nos queda claro
que Dios, perfectos nos hizo. Mc.1, 21 - 28
Que fuéramos dueños quiso, Sal. 8
de su creación sin reparo. Heb. 2, 7 - 12
Jesús, vino a ser el faro
o del hombre, la medida.
Así, quedó establecida,
¡De Dios, su predilección!
Lo comprobó a perfección,
su Mesías en esta vida.
Si los demonios hablaban: Mc. 1, 21 - 28
como bien lo conocían,
antes del tiempo decían:
que era el Mesías que esperaban.
También declaró: que estaban
en su misión, contemplados
los pueblos considerados
paganos por Israel. Lc. 4, 31 - 38
Todos tenían para El,
¡El derecho a ser salvados!
Dijo Dios con juramento:
“no entrarán en mi reposo”. Sal. 95
Y no es que estaba celoso.
¡Era más bien, un lamento! Heb. 3, 7 - 14
Era tanto el descontento
al ver tanta rebeldía.
Con milagros cada día,
no lograron comprender 2 Tes. 2, 10
que los vino a defender,
de la ajena tiranía.
Jesús no está despreciando
a su madre en el momento. Mc. 3, 22 - 30
Con el mejor sentimiento, Mt. 12, 46 - 50
su familia, estaba ampliando. Lc. 8, 19 - 21
Madre y hermanos llamando
al de buena voluntad.
A quien busca la verdad
o la voluntad del Padre,
El ama como a su madre…
(con filial intimidad.)
Cuando un cuerpo iba a sanar
primero sanaba el alma. Mc. 2, 1 - 12
Con un espíritu en calma, Mt. 9, 1
la salud, podía durar. Lc. 5, 17
El pecado, trae pesar;
el pesar, la enfermedad.
Y fue la oportunidad
para dejar bien probado,
que del cielo le ha llegado
la total autoridad.
No vine a buscar los sanos. Mc. 2, 13-17
mi labor me facilitan. Mt. 9, 9
Los malos me necesitan Lc. 5, 27 - 32
y también son mis hermanos.
A los que tengo en mis manos,
no los tengo que buscar.
Estos pueden ayudar
a buscar al extraviado.
Para todos soy enviado.
A todos quiero sanar.
La madre bien conocía
los poderes de su hijo,
Cuando a los criados le dijo
que hicieran lo que Él decía.
Segura de que Él podía Jn. 2, 1, 11
un milagro realizar,
insiste sin bacilar
Usando su autoridad.
He aquí una oportunidad
de su virtud publicar.
Si ayunando, a Dios pedí
que viniera a su vergel,
Dios con nosotros es Él, Is. 7, 14
esta vez, esta Él aquí. Mc. 2, 18-22
¿Para qué ayunar así Mt. 9, 14
cuando todo es alegría? Lc. 5, 33
Obsoleto se vería, Jn. 3, 29
el ayuno de la gente
¡Teniéndolo a Él presente
no hay tristeza en este día!
El Señor, a mi Señor.
Y siéntate a mi derecha. Salmo 110
Es una unidad estrecha,
que habla del Dios Amor. 1 Jn. 4, 7
Es binomio precursor
de la intrínseca deidad.
En esta oportunidad,
ya tenemos dos personas
que van a ser si razonas
al final, la trinidad. Jn. 7, 37-39
La ley del sábado era Gen. 2, 1-3
bien estricta en Israel.
Pero resultaba cruel,
cumplirla de tal manera. Mc. 3, 1-6
Cuando una urgencia te espera Mt. 12, 9
es crueldad, no responder. Lc. 6, 6
Está viendo padecer
y la ley lo limitaba. Lc. 13, 10 - 17
Por eso les preguntaba:
¿El mal o el bien puedo hacer?
Olor a carne quemada…
Jesucristo lo elimina.
Su sacrificio termina
aquella ley ya gastada.
Dios, no necesita nada. Sal. 50
A su pueblo se lo dijo:
De tu maldad te corrijo
y me das un animal. 1 Sam. 15, 16 - 22
¡Holocausto terminal
Vino a ser su propio hijo!
La buena nueva a llevar
los mandó por todo el mundo
con un mensaje profundo
que su nombre va a avalar. Hb. 2,4
A quien crea han de bautizar He. 2, 38
infundiendo su poder
para milagros hacer
y repartir sus favores.
Serán multiplicadores,
que harán al reino crecer.
Los envía sin equipaje Lc. 9, 1 - 6
la paz a todos darán
les dijo: de aquí se van,
Tan solo con el mensaje. Lc. 10, 1-12
Dios dará para el pasaje Mt.10, 5
eso claro lo tenían. Mc. 6,7 - 13
En nombre de Dios irían,
la cosecha era abundante.
Teniendo a Dios por garante
sustento recibirían.
Decir que Jesús estaba
del demonio poseído Mc. 3, 22-30
es pecado cometido Mt. 12, 24
que jamás se perdonaba. Lc. 11,15
Tal persona blasfemaba; Lc. 12, 8
se había equivocado tanto.
Aquel era error sin canto:
conceder a Lucifer
el absoluto poder,
que tiene el Espíritu Santo.
Con el libro de Isaías Is. 61, 1 - 3
hoy les hace comprender
que lo que El, tiene que hacer,
Lo dicen las profecías. Lc. 4, 14 - 21
Desde muy lejanos días
ya tenemos anunciado
que es cordero consagrado
a traer liberación. Is. 52, 13 – 53, 12
¡Para el mundo bendición…
Lo libera del pecado!
La palabra hay que sembrar Mc. 4, 1 - 20
no solo en la tierra buena.
El sembrar desencadena,
un optimismo sin par.
La semilla hay que regar; Mt. 13, 1
no importa donde ha caído. Lc. 8, 4 - 15
¿Mucho o poco ha producido?
Hicimos la diligencia.
Y nos queda en la conciencia,
¡La paz del deber cumplido!
Siempre se ha de esclarecer
si está lo que hicimos bien.
Pero lo malo, también;
Nada se puede esconder. Mc. 4, 21 - 25
Nuestra medida ha de ser Mt. 10 - 26
la misma con que medimos. Lc. 8, 16
Si al dar, desprendidos fuimos,
de igual modo se nos da.
También se nos quitará,
cuando nada producimos.
Con parábolas hablaba Mt. 13, 10 - 17
llamando para salvar. Mc. 4, 26 - 34
Para el reino preparar,
la parábola explicaba. Mt. 13, 31
Su ejército reclutaba
sin descuidar su misión Lc. 13, 18
de llamar sin distinción,
A salvación a este mundo.
Con su mensaje fecundo,
que nos llama a salvación.
“Permitir que en paz me muera
ahora Señor ya puedes.
A mis ojos, ver concedes,
¡Al salvador que se espera! “ Lc. 2, 22 - 40
Se expresa de esta manera
al ver al Niño, Simeón.
“Caída y resurrección,
El traerá para Israel.” Is. 8, 14
Ana la hija de Fanuel,
También prevé su misión.
Involucrando a paganos
el amor de Dios explica.
Y con esto mortifica,
y violenta a sus hermanos. Lc. 4, 21 - 30
Se creen dueños soberanos
del Dios de la humanidad.
Nunca aceptan hermandad
con ajenos a Israel.
Viene a ser Dios para él,
de exclusiva propiedad.
Que era todo poderoso
Jesús, el diablo sabía.
No tan solo obedecía;
suplicaba temeroso… Mc. 5, 1 - 20
Siendo un grupo numeroso
con Jesús, no se enfrentaban.
Al contrario le rogaban: Mt. 8, 28
¡Envíanos a aquella piara! Lc. 8, 26
Irían, donde los enviara.
Sus órdenes respetaban.
Su tarea es la salvación
Siempre queda demostrado.
Dice: tu fe te ha salvado,
sin hablar de sanación. Mc. 5, 21 - 43
El sana por compasión Mt. 9, 18
porque es lo que están pidiendo.
No le gusta ver, sufriendo
y sana la enfermedad; Lc. 8, 40
Pero trajo eternidad.
Con todo, lo está diciendo.
Dios corrige porque ama.
A los hijos los castiga; Hb. 12, 4 - 15
a quien quiere que lo siga,
a la santidad lo llama. Pro. 3, 11
Como padre nos reclama
cuando observa un desatino.
Y nos pone en el camino,
que nos lleva a disfrutar,
¡De esa vida singular,
que es de todos el destino!
Cuando todos se preparan
El los manda a misionar Mc. 6, 7 - 13
con poder para sanar
que al poseso exorcizaran. Lc. 9, 1
Les dijo: que no cobraran; Mt. 10, 5 - 15
gratuito tenía que ser.
Ellos no podían vender
lo que a nadie le compraron.
Un mensaje nos dejaron
que debemos acoger.
El valor de un juramento:
para Herodes, inviolable. Mc. 6, 14 - 30
Petición tan detestable,
debe cumplir al momento. Mt. 14, 1
Pobreza de sentimiento
en esta mente malsana:
no deja para mañana
lo que a su honor le conviene.
¡Es pobre el valor que tiene,
para ellos, la vida humana!
Como ovejas sin pastor… Mc. 6, 30 - 34
Esto hoy, sigue vigente;
no llevamos a la gente,
el mensaje del Señor. Mt. 9, 32 - 38
Cada uno es portador
del mensaje que le ha dado.
Quien ha sido bautizado
fue en profeta convertido.
Pero pocos han cumplido,
el espiritual mandado.
Toda la noche pescando
sin haber pescado nada. Lc. 5, 1 - 11
Cansados de la jornada
y lo siguen intentando.
El Maestro está mandando
a echar las redes al mar. Jn. 21, 1 - 14
Esta vez, las van a echar
seguros de otro fracaso.
Pero a El hay que hacerle caso
y vuelven a trabajar.
La sanación corporal
la concede fácilmente Mc. 6, 53 - 56
aunque trae para la gente
la salud espiritual.
Como regalo especial
a quien viene por salud,
se la da con prontitud
para moverlo a la fe.
Y es natural que de,
un poco de su virtud . Jn. 5, 1 - 16
Nos dice el libro sagrado
que todo el reino animal
viviría del vegetal. Gén.1, 20 - 31
Eso Dios, dejó ordenado.
El hombre al ser encargado Sal. 8. Gn. 2, 4 - 19
hizo de unos los carnívoros;
y de otros los herbívoros;
y para él, por ser el rey,
cambiando toda la ley, Mc. 7, 1 - 13
se hizo el de los omnívoros.
Que rasguen sus corazones
y no rasguen el vestido. Jl. 2, 12 - 18
Sacrificios no les pido.
Les pido buenas acciones. Sal. 50
¡El dará sus bendiciones
a quien hace por amor! Mt. 6, 1 – 6. 16 - 18
Al cumplir con el Señor,
el sabe muy bien que miento.
El ve nuestro sentimiento
y le da el justo valor. 2 co. 5, 20 – 6, 2
El bien nos dará la vida;
el mal nos dará la muerte; Dt. 30, 15 - 20
aquí, no se juega suerte:
por nosotros, fue escogida.
La eternidad ofrecida
todos vamos a tener. Mc. 10, 28
Lo que Dios, nos da a escoger
es la dicha, o el sufrimiento.
De nuestro comportamiento, Ecclo. 15, 11 - 21
solo suele depender.
¿Cuál ayuno a Dios agrada? Is. 58, 1 - 9
Que con justicia vivamos. Mi. 3, 8
No es diciendo que lo amamos, Mt. 6, 18
mientras su ley, es violada. Os. 8, 1
Quiere ver eliminada
del mundo, la esclavitud. Sal. 50
Cuando pedimos salud,
que sea para el mundo entero.
Pedir para mi, primero,
no lo ve, como virtud.
Jesús ve los corazones
y sabe que hay en Leví
lo que está buscando aquí. Lc. 6, 27 - 32
No le importan divisiones. Mc. 2, 13
El prevé las intenciones Mt. 9, 9
y responde lo correcto.
Involucra en su proyecto
a quien sabe que es capaz
de trabajar por la paz
de un orbe, tan imperfecto.
Jesús, humano total,
vence toda tentación Lc. 4, 1 - 13
con su total adhesión,
a su Padre Celestial.
siendo a nosotros igual,
al Diablo, logra vencer. Mt. 4, 1
Aquí sabe responder,
al eterno tentador
diciendo: que a su creador,
a prueba, El, no ha de poner.
Amor al prójimo es Jn. 15, 12 - 17
lo que Dios a todos pide. Lc. 10, 25
Y con este se decide
el juicio del justo juez. Mt. 25, 31 - 46
Preguntó: ¿Te vi, una vez
Necesitando de mi? Mc. 9, 41
¿Enfermo o preso te vi
y te estuve visitando?
El solo está reclamado,
lo que al otro, no le di. Is. 58, 7
El Padre Nuestro ha de ser
La oración por excelencia.
Expresa plena vivencia,
al pedir y ofrecer. Mt. 6, 7 - 15
Nos suele comprometer Lc. 11, 1 - 4
a darle fiel acogida
a la fórmula elegida
por Dios, para su creación.
El premio es su bendición,
¡Porque el Cristianismo, es vida!
Con la señal de Jonás: Jon. 3, 1
Estar tres días sepultado
Y ser el resucitado,
¡Que viene a traer la paz! Lc. 11, 29 - 32
Nínive, da marcha atrás…
Es el pueblo arrepentido.
Igual milagro ha tenido Jn. 6, 30 - 35
El universo, esta vez.
Aquel, saliendo de un pez. Mt. 12, 38 - 42
El, del sepulcro ha salido.
Pedir con seguridad
de que Dios va a responder. Mt. 7, 7 – 12
Pero debemos tener, Mc. 11, 24
una real necesidad. Lc. 11, 9
Infinita es su bondad Jn. 14, 13
pero conoce también
si resulta para bien
lo que le estamos pidiendo.
Mi intimidad, está viendo.
No da, sin saber a quién.
Para atar o desatar
a Pedro, le da el poder. Mt. 16, 13 - 19
Inmortal tenía que ser,
o se podía remplazar.
Todo debía continuar
y la Iglesia, ha continuado.
Es el Papa el encargado
de ejercer la dirección.
Esta brillante misión,
el mismo Jesús, le ha dado Mt. 16, 19
El amor al enemigo Mt. 5, 43 - 48
viene a ser la perfección. Mc. 12, 31
De Dios gano bendición Lc. 6, 27 - 38
si a quien me ofende bendigo. Lc. 10, 27
El promotor y testigo
de tan grande mandamiento, Ro. 13, 9
Fue Jesús : quien al momento
de morir crucificado,
nos dejó como legado,
¡Este noble sentimiento! Lc. 23, 34
Con la transfiguración Lc. 9, 28 - 36
el Padre, al Hijo presenta. Mc. 9, 2 - 10
Porque a El lo representa,
merece nuestra atención. Mt. 17, 1 - 13
Que su terrenal misión
fue por El, encomendada.
Con su palabra escuchada
y por supuesto, asumida,
tenemos en la otra vida,
¡Una gloria, asegurada
El prestar con interés Lc. 6, 34 - 38
nada tiene de bondad.
Intercambiar amistad
nada extraordinario es.
Ayudar a quien después
también me puede ayudar.
Tampoco debo juzgar Ro. 14, 10
si no quiero ser juzgado. Mt. 7, 1
Con todo nada he ganado,
que Dios me deba pagar. Sir. 4, 1 - 10
No imiten al Fariseo
pero hagan lo que dice. Mt. 23, 1 - 12
Quien su vivir analice, Mc. 12, 38
verá que resulta feo.
Como el Levita, el deseo, Lc. 20, 45
tan solo es ser admirado.
Siempre vive preocupado
por su ego enaltecer. Mt. 23, 23 - 26
Y cuanto hace suele ser,
mas que virtud, un pecado.
Todavía no le tocaba
tomar ciertas decisiones;
porque acá con sus acciones,
ejemplos de humanos daba. Mt. 20, 17 - 28
Esta vez nos enseñaba Mc. 10, 35
a quien hay que obedecer.
Se tenía que someter
a su padre hasta el final.
Este pedido especial,
no lo podía conceder.
Quien en otro hombre confía
resulta por Dios, maldito. Jr. 17, 5 - 10
Y al contrario, es bendito, Sal. 1
quien lo busca, noche y día.
El buscar a Dios sería,
la mayor seguridad.
Despreciar toda maldad,
para estar bien protegido.
Para el hombre El ha querido,
¡Eterna felicidad! Lc. 16, 19
Previendo su cruel destino
con parábola lo explica
y con esta identifica,
a su futuro asesino. Mt. 21, 33 - 48
A morir por ellos vino Mc. 12, 1
pero ellos lo matarían. Lc. 20, 9
Y con esto le darían
cumplimiento a lo anunciado.
Por haberlos denunciado,
ponerlo preso querían.
Hijo pródigo soy yo,
eres tu y él es también.
A todos nos quiere bien;
¡Por todos igual sufrió! Lc. 15, 1 – 3. 11 - 32
Al pródigo mas le dio,
cuando mas necesitaba.
Porque este, perdido estaba
y ha sido recobrado.
El otro estuvo a su lado
y él, todo se lo daba.
Nosotros somos la higuera
a la que Dios por bondad,
le dio otra oportunidad
para lograr lo que espera. Lc. 13, 1 - 9
Fue preciso que viniera
a nuestro suelo abonar
y su sangre derramar
para vernos producir.
¿Lo dejaremos sufrir
el dolor de fracasar?
Una receta sencilla
manda Eliseo, a Naamán: Lc. 4, 24 - 30
bañarse en el río Jordán;
como la gran maravilla. 2 Re. 5, 1 - 15
Este siente que lo humilla…
Tan poco, tenía que hacer.
El espera merecer,
quizás, algo extraordinario.
Para Dios, es necesario,
solamente obedecer.
El perdón de mi pecado
a Dios le puedo pedir. Mt. 18, 21 - 35
Pero no he de recibir,
lo que al otro, le he negado. Lc. 12, 54 - 59
Cuando por Dios soy amado
al prójimo debo amar.
Con esto he de demostrar
a Dios, mi agradecimiento.
El, que ve mi sentimiento,
quiere verme perdonar.
Con entera voluntad
la ley se debe vivir. Mt. 5, 17 - 19
Cuando se queda en cumplir, Lc. 16,17
se aparta de la verdad. Rom. 3, 31
Debe ser la intimidad;
a un instinto, parecida. Stgo.2, 10
Sin reglas y sin medida.
debe estar en las acciones,
sin veladas intenciones.
Ser intrínseca en la vida.
A Dios debemos dejar
que administre la justicia.
El sabe a quién acaricia,
y a quien debe castigar. Sal. 94
Nuestro modo de pensar
El conoce plenamente.
Sabe qué hay en nuestra mente;
también en el corazón.
Siempre tiene la razón.
Nadie le es indiferente.
Amar a Dios, el primero. Dt. 6, 4
El único, yo diría. Mc. 12, 28- -34
Pues vano mi amor sería,
si a mi prójimo no quiero. Lev. 19, 18
Si le soy a Dios sincero,
mi prójimo viene a ser:
objeto de mi quehacer,
porque este me necesita.
Cuanto Dios, me solicita,
es tan solo obedecer. Mt. 22, 34 - 40
El que grande se ha creído
al final, será humillado.
Quién confiesa su pecado,
¡Por Dios, será enaltecido! Lc.18, 9 - 14
Dios castiga al poseído Pro. 21, 2
porque ha sido cumplidor Mt. 6, 1
de las leyes sin amor,
por lograr la eternidad.
¡Recompensa la humildad!
¡Nadie engaña a mi Señor! Lc. 16, 15
El hijo que está sufriendo
es el que hoy lo necesita. Lc. 15, 11 - 32
Hoy su ayuda solicita
y sin mas, lo está sirviendo.
No está para estar midiendo
el tesoro que ha gastado.
Eso queda en el pasado.
Solo vale: aquí y ahora.
Y lo atiende sin demora…
¡Al perdido, ha recobrado!
Aquel funcionario real
y por supuesto, pagano;
encuentra a su hijo sano,
y recibe una señal. Jn. 4, 43 - 54
Que Jesús venciera el mal, Mt. 8,5
el hombre creyó sin ver. Lc. 7, 1
Cuando decide volver
a encontrar sano a su hijo.
Porque Jesús se lo dijo
y así, tenía que ser.
Su padre, a Dios, ha llamado.
Y su ley, está violando.
En Sábado trabajando…
¿Podía haber mayor pecado?
¡A un inválido ha sanado!
¡Le duele ver padecer!
Y no pueden entender
su total abnegación.
Por su inmensa compasión,
lo vienen a reprender. Jn. 5, 1 – 16
Jesús nos puede juzgar He. 10, 42
porque nos conoce bien.
Siendo hombre, es Dios también, Jn. 5, 17 - 30
que al hombre vino a salvar.
Quien a El, sepa escuchar, Lc. 10, 16
la vida eterna tendrá. Jn. 11, 25
Expedito pasará
de la muerte, a la otra vida 1 Sam. 2, 6
porque ha sido prometida,
¡Y Dios, por El, la dará! Jn. 12, 44 - 50
El antiguo testamento
es anuncio de Jesús.
Hasta su muerte en la cruz, He. 13, 27
nos anuncia en su momento. Jn. 5, 31 - 47
Evangelio, es su argumento.
(Aquí, Jesús, está hablando.)
Las cartas, van recordando
su paso por este mundo.
Quien escudriña profundo, Lc. 24, 27
la verdad, está buscando.
¿No es el que querían matar? Jn. 5, 19
¿No es el que estaban buscando?
Aquí lo tienen hablando
y nada suele pasar. Jn. 7, 1 -2. 10. 25 - 30
Hay un misterio en su actuar.
Lo matarían sin demora.
Pero hay algo que se ignora:
que aunque todo escrito está,
su destino acogerá, Lc. 13, 32
pero El, decide la hora. Jn. 8, 59
El que no tenga pecado,
la primera piedra lance.
Infinito es el alcance,
en lo que hoy, ha sentenciado. Jn. 8, 1 - 11
Nadie quiere ser juzgado,
pero nos gusta juzgar. Mt. 7, 1 - 5
Y queremos castigar
nuestras faltas en los otros. Dt. 22, 22
El comprueba que en nosotros,
estas suelen resaltar.
Los guardias lo respetaron
por la forma como hablaba.
Todo el pueblo lo escuchaba, Mt. 13, 54
Y libre se lo dejaron. Jn. 7, 40 - 53
¿”Porqué, no se lo llevaron”?
Reclaman los fariseos.
Incumplieron sus deseos,
por no encontrar el motivo.
¿” Son del grupo subversivo?
Serán también galileos”?
Cuando les dice: Yo Soy, Ex. 3, 14
está diciendo, que es Dios. Jn. 13, 16 - 20
Es testimonio de dos,
el testimonio que doy. Jn. 8, 21 - 30
De donde vine o me voy,
mi Padre y Yo, lo sabemos.
Nosotros nos conocemos,
o el uno, en el otro está. Jn. 14, 1 - 14
Uno del otro será,
testigo de lo que hacemos.
José es el padre adoptivo. Lc. 1, 27
A Jesús le puso nombre.
Y será el hijo del hombre,
para un especial motivo.
Nos resulta positivo…
¡Dios con nosotros será! Mt. 1, 18- 24
Quien a este mundo vendrá
a enseñarnos a vivir
para poder recibir,
¡La gloria que nos dará! He. 4, 12
No nos basta con creer
debemos perseverar. Gál. 3 - 4
Su palabra debe estar,
adherida a nuestro ser. Jn. 8, 31 - 42
Jesús nos vino a traer
para todos la verdad, Rom. 6, 17
que nos da la libertad.
La libertad del pecado
que mantiene al hombre atado
y lo induce a la maldad. 1 Jn. 3, 8
Yo soy Dios, está diciendo Jn. 1, 1. 1, 30
como Dios, dijo a Moisés. Jn. 8, 51 - 59
Que Jesucristo, Dios es,
ya lo vamos entendiendo.
Aquí se está refiriendo
al decir: no morirá, Jn. 6, 52 - 59
que este jamás sufrirá,
de nuestro Señor, la ausencia.
¡Quien lo escucha, en su presencia,
para siempre vivirá! Jn. 11, 25
La turba a apedrearlo va
por llamarle padre, a Dios Jn. 10, 31 - 42
y declara que los dos,
el uno en el otro está.
Las razones que les da,
no las pueden rebatir
y termina por decir,
que está aquí, por Dios enviado.
Que le digan el pecado,
por el que debe morir
Profetisa en la ocasión,
el sacerdote Caifás.
Que muera uno nada más,
y no toda la nación. Jn. 11, 45 - 56
Y se cumple a perfección
la escritura que decía,
¡Que el cordero, Dios daría,
para el mundo redimir!
¡Y quien tenía que morir,
era el hijo de María!
Cristo trae liberación
que se logra sin violencia. Lc. 19, 28 - 40
Demuestra la diferencia,
su extraña locomoción. Mc. 11, 1
Un burrito, en la ocasión, Mt. 21, 1
humilde cabalgadura. Jn. 12, 12
Una libertad augura,
que resulta individual.
¡Libertad espiritual!
¡Es una paz, que perdura!
Para expresar caridad,
los pobres, siempre tendrán.
A Mi, ya no me verán,
para darme la amistad. Jn. 12, 1 - 11
Esta es su oportunidad. Mt. 26, 6
¡Déjenla hacer por favor! Mc. 14, 1
¡Está derramando amor,
que es la más grande virtud!
¡Es tan bella su actitud,
está ungiendo a su Señor!
Pronto, haz lo que vas a hacer
le dijo Jesús, a Judas. Jn. 13, 21 - 38
Y se borraron las dudas,
que Judas podía tener.
El, lo tenía que vender
porque todo, escrito, estaba. He. 1, 16 - 17
Todo se desarrollaba,
tal como estaba anunciado:
Jesús sería traicionado,
¡Y todo se consumaba!
Cuando Judas preguntó,
conociendo bien su parte:
¿Seré yo, quien va a entregarte?
Tu lo has dicho, contestó. Jn. 13, 21 - 32
Judas no, se lo negó,
aunque estaba arrepentido.
Ya se había comprometido. Mt. 26, 14 - 25
¡Que el perdón Dios le conceda!
¡Por amor a la moneda,
al Señor, había vendido! Mt. 27, 3
Siendo maestro y Señor
les ha lavado los pies. Jn. 13, 1 - 15
Tan solo un ejemplo es,
Del reinado del amor!
Ser de todos servidor, Lc. 22, 27
es lema de su reinado. 1 Jn. 3, 16
Y este ejemplo ha quedado
para quien quiera ser Rey;
que cumpla con esta ley,
que Jesús, nos ha dejado.
El antiguo testamento
en el libro de Isaías Is. 52, 13 - 53, 12
y todas las profecías,
anuncian este momento. Jn. 18, 1 - 19
Conociendo el gran tormento Lc. 22, 47
que en su final esperaba, Hb. 5, 7 - 9
al grupo que lo buscaba, Mt. 26, 47
Yo Soy le dijo valiente. Ex. 3, 14
Llévenme a mi, solamente. Mc. 14, 43
¡A sufrir, dispuesto estaba!
Aquí comienza la historia
de la salvación del hombre. Gen. 1, 1 – 2, 2
Del que a todo puso nombre.
¡Del objeto de la gloria!
Mas sin lucha y sin victoria, Ap. 12, 1 - 18
esta gloria, no se obtiene.
¡Con el amor que nos tiene, Lc. 24, 1 - 12
el Creador envió la luz! Mc. 16, 8
Hoy sabemos que Jesús, Mt. 28, 1
¡Es Dios, que a este mundo viene! Jn. 20, 1
Por concepción milagrosa Is. 7, 14
los dos al mundo venían; Lc. 1, 5 - 25
Juan y Jesús que traían, Mt. 1, 18 - 25
¡Una misión tan hermosa!
¡Es una escena gloriosa!
Dos seres en gestación, Lc. 1, 39 - 48
tenían comunicación
estando en el vientre aún.
Venían con misión común: Jn.1, 6 - 8
¡Traernos la salvación!
Juan en el reino es pequeño.
¡El grande entre los nacidos!
No está entre los escogidos Lc. 7, 28
para ser del reino dueño. Lc. 16, 16
No entraba en su desempeño
ese reino administrar.
Él lo vino a proclamar Mal. 3, 1
Y los otros, a formarlo.
Una cosa es anunciarlo
¡Y otra es en él estar! Mt. 11, 11 - 15
Porque no hace, o porque hace Mt. 9, 14
siempre suelen criticar; Mt. 3, 4
por abstemio, o por tomar,
nunca falta quien rechace. Mt. 11, 16 - 19
A todos, nadie complace
pero El, que vino a servir,
intentaba convivir Mt. 9, 10 - 11
para enseñar lo perfecto.
Y les parecía incorrecto, Lc. 15, 1
cada modo de vivir.
Que Juan como un nuevo Elías Mt. 17, 10 - 13
tenía que venir, y vino. Jn. 1, 17. Mal. 3, 23
Portador de igual destino, Mt. 11, 14
lo anuncian las profecías. Mc. 9, 11
También dicen que el Mesías
¡Tendrá mucho sufrimiento! Si. 48, 1
Y no hay arrepentimiento…
¡Hacia el cadalso, camina!
¡Con el amor elimina,
de su alma, el desaliento!
¡Hoy todo habla de alegría
en espera del Señor! So. 3, 14 - 18
¡Se espera paz y amor!
¡El nacer del nuevo día! Sal: Is. 12, 3 - 6
El profeta nos decía:
que las cosas cambiarán. Flp. 4, 4 - 7
Un mundo feliz, verán
porque el Rey, muy pronto viene.
Esto nadie lo detiene.
Lo anuncia el bautista Juan. Lc. 3, 10 – 18
Si estudiamos su ascendencia Mt. 1, 1 - 17
hay de todo: malo y bueno. Lc. 3, 23 - 38
Jesús desechó el veneno
Y guardó la sana esencia.
Con su humana inteligencia
tan sólo vino a ilustrar.
A enseñarnos a encontrar,
la semejanza perdida. Gén. 1, 26 - 27
Con su plena humana vida,
nos lo vino a demostrar.
Virginidad de María; Mt. 1, 18 - 25
de Jesucristo deidad; Lc. 1, 26 - 38
de José su gran bondad;
verdad de la profecía. Is. 7, 14
Las lecturas de este día
no nos permiten dudar.
Un Ángel le viene a dar
a María la fiel noticia:
¡Que en ella el rey de justicia, Jer. 23, 5 - 8
a este mundo, va a llegar!
Era anciano Zacarías.
Era estéril Isabel.
Por eso dudaba él,
de lo que el hombre decía.
Además, él no sabía
que era Ángel por Dios enviado.
Lo que tanto había esperado,
esta vez se le concede. Lc. 1, 5 - 25
¡Tal bondad, creer no puede!
Por dudar, fue castigado.
El Señor es mi pastor
por eso nada me falta. Sal. 23 adaptación al folklore
Está mi autoestima alta,
porque El es mi servidor.
No siento ningún temor,
porque siempre está conmigo.
El enfrenta a mi enemigo
y perfuma mi cabeza.
Es su casa mi dehesa
por largos días. ¡Lo bendigo!
Bendita entre las mujeres
dice Isabel a María Lc. 1 - 39 - 45
porque al mundo le daría,
¡El mayor de los placeres!
El saludo de dos seres
desde el vientre maternal,
está anunciando el final
de aquella bendita espera.
¡Un Dios que al mundo libera,
del pecado original! Gen. 3, 1 - 19
¡Para el mundo hay alegría
se aproxima el justo Rey! Is. 1, 24 - 28
Se anuncia para su grey, Is. 2, 1 - 8
¡El nacer de un nuevo día!
A Dios le canta María, Lc. 1, 46 - 56
plenamente agradecida
por haber sido escogida
para gestar en su ser,
al Rey que viene a traer,
¡La paz, por Dios prometida!
El cuerpo que Dios le dio
El lo pone a su servicio. Heb. 10, 1 - 10
Con un solo sacrificio,
a la creación redimió.
¡Con su sangre nos limpió
del pecado original!
Así le puso final
a lo que pedía la ley.
¡Por su holocausto su grey, Mi. 5, 1 - 4
hoy se libera del mal!
Igual que a Jesús, a Juan
fue Dios quien les puso nombre. Lc. 1, todo
Porque en la historia del hombre,
protagonismo tendrán.
Esto dice que serán
para algo grande escogidos.
Por Dios están decididos,
sus pasos en la creación:
¡Luchar por la redención,
De los que estamos perdidos!
Primero, palabra era. Jn. 1, 1 – 18
Y la palabra era Dios. Gen. 1,1
Hacen uno entre los dos. Ap. 19, 13
Ese Dios que el mundo espera. Pro. 8, 22
¡Si al llegar lo recibiera! Sab. 9, 1
¡Pero lo lleva a la cruz! 1 Jn. 2, 8
no hace presa de la luz.
Tiniebla, prefiere ser.
Quien quiere puede tener,
¡A Dios en El… (En Jesús!)
Jesús le vaticinó,
maltrato a sus seguidores. Mt. 10, 17 - 22
¡Tendrán que sufrir horrores! Mc. 13, 9
Esteban se resignó. Hch. 6, 8 – 10 7, 54 – 60
¡El pueblo lo asesinó,
en esa forma macabra!
El espera que se abra
El cielo en su día postrero.
¡Es Esteban el primero,
en morir por la palabra!
Jesús mismo lo anunció
y también la profecía: Jn. 20, 2 - 8
Cristo resucitaría. Lc. 24, 25 - 27
Pero nadie lo entendió.
Por eso los sorprendió
en el sepulcro, su ausencia.
Aquí estaba la evidencia,
del Mesías que se esperaba.
¡Y con esto comprobaba,
su total omnipotencia!
¡El defensor de este mundo
fue del mundo rechazado. Mt. 2, 13 - 18
De su patria desterrado, Mt. 2, 19
viviendo cual vagabundo!
Presa del celo profundo Jn. 7, 40 - 53
De la clase dominante. Jer. 31, 15
En su vida no hubo instante
De ocio y de tranquilidad.
¡La fatal adversidad,
Siempre anduvo por delante!
Quien pretende conocer 1 Jn. 2, 3 - 11
a Cristo y no lo obedece, Jn. 14,21
por más que a su Dios le rece,
en tiniebla está su ser. Jn. 12, 35
¿Quiere la luz poseer?
Obedézcale al Señor. Pro. 4, 18
Él nos pidió con fervor
al momento de partir:
su mandamiento vivir.
¡Mandamiento del amor! Jn. 13, 34
Obediencia por amor
hoy nos pide la palabra. Lc. 2, 41 - 52
Quien ama su gloria labra Sal. 127
y complace a su creador. Si. 3, 2 – 8 12 - 14
Pedir todo por favor
practicado en el hogar,
al servicio suele dar
viso de espontaneidad.
Y fiel reciprocidad, Col. 3, 12 - 21
la familia ha de adornar.
¡A partir de mi bautismo
paso a ser hijo de Dios! Jn. 1, 1 - 18
Porque he escuchado su voz,
he salido del abismo.
Aceptado por mi mismo
tan bello acontecimiento,
su hijo espiritual me siento. Gal. 3, 23 - 29
¡Como tal, logré nacer!
Mi bautismo vino a ser,
mi segundo nacimiento. Jn. 1, 12
Llegada la plenitud
de los tiempos Dios envía Gal. 4, 4 - 7
a su hijo que traía,
la mas celestial virtud! Lc. 2, 8 - 18
Con su inmensa beatitud
a todos diciendo está
que el gran tesoro nos da
plenamente satisfecho.
¡Donándonos el derecho,
De llamarle a Dios, papá!
Juan a Jesús conocía
pero no como el Cordero. Ap. 5, 6
Fue plenamente sincero. Mt. 8, 17
Expresó, lo que veía. Jn. 1 29 - 34
Por revelación sabía Mc.1, 7 - 11
que al espíritu iba a ver Jn.1,33
sobre el Mesías descender,
cuando fuera a bautizarlo.
Aquí pudo comprobarlo, Is. 42, 1
¡Y lo expresó con placer!
¿Dónde vives? Preguntaron.
Vengan y verán, les dijo. Jn. 1, 35 - 42
En un palacio. Corrijo.
¡Sólo humildad, encontraron!
Pero con El se quedaron;
no buscaban opulencia.
Sabían que la omnipotencia
en palacios, no habitaba. 2 Sam. 7, 1 - 11
El Mesías que se esperaba,
sería de su descendencia.
Jesús ve en Natanael
su total sinceridad Jn. 1, 43 - 51
y también la facultad,
para hacer apóstol, de El. Lc. 6, 12 - 16
A cada uno su papel: Mc. 3, 13 - 19
que podía desempeñar.
Judas para traicionar, Jn. 14, 27
Simón para sucederlo. Mt. 16, 18
Y así, podemos verlo,
su reinado organizar. Lc. 22, 29
Un mundo incomunicado
se entera de la llegada Mt. 2, 1 - 12
desde siglos anunciada,
¡Del Mesías tan esperado!
De tan lejos han llegado
a rendirle adoración Is. 60, 1 - 6
al Rey de la gran nación
que ha de ser el mundo entero.
En un aposento austero,
¡Le nace cual bendición! Ef. 3, 2 - 6
A este Jesús peregrino
Isaías había anunciado; Is. 8, 23
su itinerario marcado
Jesús tenía cuando vino. Mt. 4, 12 – 17. 23 - 25
Era la luz que el camino
a todos iba a alumbrar. Lc. 1, 79
La libertad recobrar
de israelitas y paganos.
Que todos somos hermanos,
El nos vino a demostrar.
Que Dios nos amó primero 1 Jn. 4, 7 - 10
portándonos bien, o mal
y a todos por igual,
al veraz, o al embustero.
Nos dio el universo entero,
con entero regocijo.
Sin méritos nos bendijo
sin importarle el pasado. Sal. 71
Para lavar el pecado,
¡Nos envió a su propio Hijo! Jn. 3, 16
Caminando sobre el mar…
Un fantasma puede ser. Mc. 6, 45 - 52
¿Cuánto milagro ha de hacer Mt. 14, 22
para esa fe despertar? Jn. 6, 16 - 21
Acaban de presenciar
el del pan multiplicado
y todo cuanto se ha dado
que comprueba su deidad.
Y con esta novedad,
su grupo, grita asustado.
Que presente está el Mesías Lc. 4, 14 - 22
fue su mensaje fecundo.
Va a liberar este mundo,
como lo dijo Isaías. Is. 61, 1
Se cumplen las profecías
que aquí acaban de escuchar. Lc. 21, 31
Que los cojos va a andar
y los ciegos van a ver.
He aquí, lo que vino a hacer,
Y lo van a rechazar. Mt. 13, 53 - 58
Al decir: si quiere, puede,
reconoce omnipotencia. Lc. 5, 12 - 16
Luego, pone en evidencia,
el bien que se le concede.
El, no ve bien que se quede,
sin este bien compartir.
Y comienza a difundir,
el milagro realizado. Mt. 8, 2
Aunque le habían ordenado,
que no lo debía decir. Mc. 1, 40 - 45
Según nos explica Juan,
no es igual todo pecado. 1 Jn. 5, 14 - 21
Hay quien puede ser salvado,
con la ayuda que le dan.
A Dios por él rogarán
si el pecado no es mortal Hb. 6, 4. 10,26
y se separa del mal
en virtud de su bautismo. Jn. 17, 15
Y se sale del abismo,
en su vida terrenal.
Siendo Dios, fue bautizado. Lc.3, 21
Con lo cual quiso decir:
que debemos recibir, Mt. 3, 13
el sacramento indicado. Mc. 1, 7 - 11
El espíritu ha bajado,
a decir, que así se hará.
Con nosotros estará,
lo dijo en aquel momento.
Quien reciba el sacramento,
a El mismo recibirá.
Dios habló por los profetas.
Hoy nos habla por su hijo. Heb. 1, 1 - 6
Quien se hizo crucifijo,
para darnos la receta.
Mostró la mejor faceta
haciendo bien, cuanto hizo.
A su Padre satisfizo,
cumpliendo con su destino.
Se convirtió en el camino, Jn. 14, 6
de llegar al paraíso.
Con Jesús nos queda claro
que Dios, perfectos nos hizo. Mc.1, 21 - 28
Que fuéramos dueños quiso, Sal. 8
de su creación sin reparo. Heb. 2, 7 - 12
Jesús, vino a ser el faro
o del hombre, la medida.
Así, quedó establecida,
¡De Dios, su predilección!
Lo comprobó a perfección,
su Mesías en esta vida.
Si los demonios hablaban: Mc. 1, 21 - 28
como bien lo conocían,
antes del tiempo decían:
que era el Mesías que esperaban.
También declaró: que estaban
en su misión, contemplados
los pueblos considerados
paganos por Israel. Lc. 4, 31 - 38
Todos tenían para El,
¡El derecho a ser salvados!
Dijo Dios con juramento:
“no entrarán en mi reposo”. Sal. 95
Y no es que estaba celoso.
¡Era más bien, un lamento! Heb. 3, 7 - 14
Era tanto el descontento
al ver tanta rebeldía.
Con milagros cada día,
no lograron comprender 2 Tes. 2, 10
que los vino a defender,
de la ajena tiranía.
Jesús no está despreciando
a su madre en el momento. Mc. 3, 22 - 30
Con el mejor sentimiento, Mt. 12, 46 - 50
su familia, estaba ampliando. Lc. 8, 19 - 21
Madre y hermanos llamando
al de buena voluntad.
A quien busca la verdad
o la voluntad del Padre,
El ama como a su madre…
(con filial intimidad.)
Cuando un cuerpo iba a sanar
primero sanaba el alma. Mc. 2, 1 - 12
Con un espíritu en calma, Mt. 9, 1
la salud, podía durar. Lc. 5, 17
El pecado, trae pesar;
el pesar, la enfermedad.
Y fue la oportunidad
para dejar bien probado,
que del cielo le ha llegado
la total autoridad.
No vine a buscar los sanos. Mc. 2, 13-17
mi labor me facilitan. Mt. 9, 9
Los malos me necesitan Lc. 5, 27 - 32
y también son mis hermanos.
A los que tengo en mis manos,
no los tengo que buscar.
Estos pueden ayudar
a buscar al extraviado.
Para todos soy enviado.
A todos quiero sanar.
La madre bien conocía
los poderes de su hijo,
Cuando a los criados le dijo
que hicieran lo que Él decía.
Segura de que Él podía Jn. 2, 1, 11
un milagro realizar,
insiste sin bacilar
Usando su autoridad.
He aquí una oportunidad
de su virtud publicar.
Si ayunando, a Dios pedí
que viniera a su vergel,
Dios con nosotros es Él, Is. 7, 14
esta vez, esta Él aquí. Mc. 2, 18-22
¿Para qué ayunar así Mt. 9, 14
cuando todo es alegría? Lc. 5, 33
Obsoleto se vería, Jn. 3, 29
el ayuno de la gente
¡Teniéndolo a Él presente
no hay tristeza en este día!
El Señor, a mi Señor.
Y siéntate a mi derecha. Salmo 110
Es una unidad estrecha,
que habla del Dios Amor. 1 Jn. 4, 7
Es binomio precursor
de la intrínseca deidad.
En esta oportunidad,
ya tenemos dos personas
que van a ser si razonas
al final, la trinidad. Jn. 7, 37-39
La ley del sábado era Gen. 2, 1-3
bien estricta en Israel.
Pero resultaba cruel,
cumplirla de tal manera. Mc. 3, 1-6
Cuando una urgencia te espera Mt. 12, 9
es crueldad, no responder. Lc. 6, 6
Está viendo padecer
y la ley lo limitaba. Lc. 13, 10 - 17
Por eso les preguntaba:
¿El mal o el bien puedo hacer?
Olor a carne quemada…
Jesucristo lo elimina.
Su sacrificio termina
aquella ley ya gastada.
Dios, no necesita nada. Sal. 50
A su pueblo se lo dijo:
De tu maldad te corrijo
y me das un animal. 1 Sam. 15, 16 - 22
¡Holocausto terminal
Vino a ser su propio hijo!
La buena nueva a llevar
los mandó por todo el mundo
con un mensaje profundo
que su nombre va a avalar. Hb. 2,4
A quien crea han de bautizar He. 2, 38
infundiendo su poder
para milagros hacer
y repartir sus favores.
Serán multiplicadores,
que harán al reino crecer.
Los envía sin equipaje Lc. 9, 1 - 6
la paz a todos darán
les dijo: de aquí se van,
Tan solo con el mensaje. Lc. 10, 1-12
Dios dará para el pasaje Mt.10, 5
eso claro lo tenían. Mc. 6,7 - 13
En nombre de Dios irían,
la cosecha era abundante.
Teniendo a Dios por garante
sustento recibirían.
Decir que Jesús estaba
del demonio poseído Mc. 3, 22-30
es pecado cometido Mt. 12, 24
que jamás se perdonaba. Lc. 11,15
Tal persona blasfemaba; Lc. 12, 8
se había equivocado tanto.
Aquel era error sin canto:
conceder a Lucifer
el absoluto poder,
que tiene el Espíritu Santo.
Con el libro de Isaías Is. 61, 1 - 3
hoy les hace comprender
que lo que El, tiene que hacer,
Lo dicen las profecías. Lc. 4, 14 - 21
Desde muy lejanos días
ya tenemos anunciado
que es cordero consagrado
a traer liberación. Is. 52, 13 – 53, 12
¡Para el mundo bendición…
Lo libera del pecado!
La palabra hay que sembrar Mc. 4, 1 - 20
no solo en la tierra buena.
El sembrar desencadena,
un optimismo sin par.
La semilla hay que regar; Mt. 13, 1
no importa donde ha caído. Lc. 8, 4 - 15
¿Mucho o poco ha producido?
Hicimos la diligencia.
Y nos queda en la conciencia,
¡La paz del deber cumplido!
Siempre se ha de esclarecer
si está lo que hicimos bien.
Pero lo malo, también;
Nada se puede esconder. Mc. 4, 21 - 25
Nuestra medida ha de ser Mt. 10 - 26
la misma con que medimos. Lc. 8, 16
Si al dar, desprendidos fuimos,
de igual modo se nos da.
También se nos quitará,
cuando nada producimos.
Con parábolas hablaba Mt. 13, 10 - 17
llamando para salvar. Mc. 4, 26 - 34
Para el reino preparar,
la parábola explicaba. Mt. 13, 31
Su ejército reclutaba
sin descuidar su misión Lc. 13, 18
de llamar sin distinción,
A salvación a este mundo.
Con su mensaje fecundo,
que nos llama a salvación.
“Permitir que en paz me muera
ahora Señor ya puedes.
A mis ojos, ver concedes,
¡Al salvador que se espera! “ Lc. 2, 22 - 40
Se expresa de esta manera
al ver al Niño, Simeón.
“Caída y resurrección,
El traerá para Israel.” Is. 8, 14
Ana la hija de Fanuel,
También prevé su misión.
Involucrando a paganos
el amor de Dios explica.
Y con esto mortifica,
y violenta a sus hermanos. Lc. 4, 21 - 30
Se creen dueños soberanos
del Dios de la humanidad.
Nunca aceptan hermandad
con ajenos a Israel.
Viene a ser Dios para él,
de exclusiva propiedad.
Que era todo poderoso
Jesús, el diablo sabía.
No tan solo obedecía;
suplicaba temeroso… Mc. 5, 1 - 20
Siendo un grupo numeroso
con Jesús, no se enfrentaban.
Al contrario le rogaban: Mt. 8, 28
¡Envíanos a aquella piara! Lc. 8, 26
Irían, donde los enviara.
Sus órdenes respetaban.
Su tarea es la salvación
Siempre queda demostrado.
Dice: tu fe te ha salvado,
sin hablar de sanación. Mc. 5, 21 - 43
El sana por compasión Mt. 9, 18
porque es lo que están pidiendo.
No le gusta ver, sufriendo
y sana la enfermedad; Lc. 8, 40
Pero trajo eternidad.
Con todo, lo está diciendo.
Dios corrige porque ama.
A los hijos los castiga; Hb. 12, 4 - 15
a quien quiere que lo siga,
a la santidad lo llama. Pro. 3, 11
Como padre nos reclama
cuando observa un desatino.
Y nos pone en el camino,
que nos lleva a disfrutar,
¡De esa vida singular,
que es de todos el destino!
Cuando todos se preparan
El los manda a misionar Mc. 6, 7 - 13
con poder para sanar
que al poseso exorcizaran. Lc. 9, 1
Les dijo: que no cobraran; Mt. 10, 5 - 15
gratuito tenía que ser.
Ellos no podían vender
lo que a nadie le compraron.
Un mensaje nos dejaron
que debemos acoger.
El valor de un juramento:
para Herodes, inviolable. Mc. 6, 14 - 30
Petición tan detestable,
debe cumplir al momento. Mt. 14, 1
Pobreza de sentimiento
en esta mente malsana:
no deja para mañana
lo que a su honor le conviene.
¡Es pobre el valor que tiene,
para ellos, la vida humana!
Como ovejas sin pastor… Mc. 6, 30 - 34
Esto hoy, sigue vigente;
no llevamos a la gente,
el mensaje del Señor. Mt. 9, 32 - 38
Cada uno es portador
del mensaje que le ha dado.
Quien ha sido bautizado
fue en profeta convertido.
Pero pocos han cumplido,
el espiritual mandado.
Toda la noche pescando
sin haber pescado nada. Lc. 5, 1 - 11
Cansados de la jornada
y lo siguen intentando.
El Maestro está mandando
a echar las redes al mar. Jn. 21, 1 - 14
Esta vez, las van a echar
seguros de otro fracaso.
Pero a El hay que hacerle caso
y vuelven a trabajar.
La sanación corporal
la concede fácilmente Mc. 6, 53 - 56
aunque trae para la gente
la salud espiritual.
Como regalo especial
a quien viene por salud,
se la da con prontitud
para moverlo a la fe.
Y es natural que de,
un poco de su virtud . Jn. 5, 1 - 16
Nos dice el libro sagrado
que todo el reino animal
viviría del vegetal. Gén.1, 20 - 31
Eso Dios, dejó ordenado.
El hombre al ser encargado Sal. 8. Gn. 2, 4 - 19
hizo de unos los carnívoros;
y de otros los herbívoros;
y para él, por ser el rey,
cambiando toda la ley, Mc. 7, 1 - 13
se hizo el de los omnívoros.
Que rasguen sus corazones
y no rasguen el vestido. Jl. 2, 12 - 18
Sacrificios no les pido.
Les pido buenas acciones. Sal. 50
¡El dará sus bendiciones
a quien hace por amor! Mt. 6, 1 – 6. 16 - 18
Al cumplir con el Señor,
el sabe muy bien que miento.
El ve nuestro sentimiento
y le da el justo valor. 2 co. 5, 20 – 6, 2
El bien nos dará la vida;
el mal nos dará la muerte; Dt. 30, 15 - 20
aquí, no se juega suerte:
por nosotros, fue escogida.
La eternidad ofrecida
todos vamos a tener. Mc. 10, 28
Lo que Dios, nos da a escoger
es la dicha, o el sufrimiento.
De nuestro comportamiento, Ecclo. 15, 11 - 21
solo suele depender.
¿Cuál ayuno a Dios agrada? Is. 58, 1 - 9
Que con justicia vivamos. Mi. 3, 8
No es diciendo que lo amamos, Mt. 6, 18
mientras su ley, es violada. Os. 8, 1
Quiere ver eliminada
del mundo, la esclavitud. Sal. 50
Cuando pedimos salud,
que sea para el mundo entero.
Pedir para mi, primero,
no lo ve, como virtud.
Jesús ve los corazones
y sabe que hay en Leví
lo que está buscando aquí. Lc. 6, 27 - 32
No le importan divisiones. Mc. 2, 13
El prevé las intenciones Mt. 9, 9
y responde lo correcto.
Involucra en su proyecto
a quien sabe que es capaz
de trabajar por la paz
de un orbe, tan imperfecto.
Jesús, humano total,
vence toda tentación Lc. 4, 1 - 13
con su total adhesión,
a su Padre Celestial.
siendo a nosotros igual,
al Diablo, logra vencer. Mt. 4, 1
Aquí sabe responder,
al eterno tentador
diciendo: que a su creador,
a prueba, El, no ha de poner.
Amor al prójimo es Jn. 15, 12 - 17
lo que Dios a todos pide. Lc. 10, 25
Y con este se decide
el juicio del justo juez. Mt. 25, 31 - 46
Preguntó: ¿Te vi, una vez
Necesitando de mi? Mc. 9, 41
¿Enfermo o preso te vi
y te estuve visitando?
El solo está reclamado,
lo que al otro, no le di. Is. 58, 7
El Padre Nuestro ha de ser
La oración por excelencia.
Expresa plena vivencia,
al pedir y ofrecer. Mt. 6, 7 - 15
Nos suele comprometer Lc. 11, 1 - 4
a darle fiel acogida
a la fórmula elegida
por Dios, para su creación.
El premio es su bendición,
¡Porque el Cristianismo, es vida!
Con la señal de Jonás: Jon. 3, 1
Estar tres días sepultado
Y ser el resucitado,
¡Que viene a traer la paz! Lc. 11, 29 - 32
Nínive, da marcha atrás…
Es el pueblo arrepentido.
Igual milagro ha tenido Jn. 6, 30 - 35
El universo, esta vez.
Aquel, saliendo de un pez. Mt. 12, 38 - 42
El, del sepulcro ha salido.
Pedir con seguridad
de que Dios va a responder. Mt. 7, 7 – 12
Pero debemos tener, Mc. 11, 24
una real necesidad. Lc. 11, 9
Infinita es su bondad Jn. 14, 13
pero conoce también
si resulta para bien
lo que le estamos pidiendo.
Mi intimidad, está viendo.
No da, sin saber a quién.
Para atar o desatar
a Pedro, le da el poder. Mt. 16, 13 - 19
Inmortal tenía que ser,
o se podía remplazar.
Todo debía continuar
y la Iglesia, ha continuado.
Es el Papa el encargado
de ejercer la dirección.
Esta brillante misión,
el mismo Jesús, le ha dado Mt. 16, 19
El amor al enemigo Mt. 5, 43 - 48
viene a ser la perfección. Mc. 12, 31
De Dios gano bendición Lc. 6, 27 - 38
si a quien me ofende bendigo. Lc. 10, 27
El promotor y testigo
de tan grande mandamiento, Ro. 13, 9
Fue Jesús : quien al momento
de morir crucificado,
nos dejó como legado,
¡Este noble sentimiento! Lc. 23, 34
Con la transfiguración Lc. 9, 28 - 36
el Padre, al Hijo presenta. Mc. 9, 2 - 10
Porque a El lo representa,
merece nuestra atención. Mt. 17, 1 - 13
Que su terrenal misión
fue por El, encomendada.
Con su palabra escuchada
y por supuesto, asumida,
tenemos en la otra vida,
¡Una gloria, asegurada
El prestar con interés Lc. 6, 34 - 38
nada tiene de bondad.
Intercambiar amistad
nada extraordinario es.
Ayudar a quien después
también me puede ayudar.
Tampoco debo juzgar Ro. 14, 10
si no quiero ser juzgado. Mt. 7, 1
Con todo nada he ganado,
que Dios me deba pagar. Sir. 4, 1 - 10
No imiten al Fariseo
pero hagan lo que dice. Mt. 23, 1 - 12
Quien su vivir analice, Mc. 12, 38
verá que resulta feo.
Como el Levita, el deseo, Lc. 20, 45
tan solo es ser admirado.
Siempre vive preocupado
por su ego enaltecer. Mt. 23, 23 - 26
Y cuanto hace suele ser,
mas que virtud, un pecado.
Todavía no le tocaba
tomar ciertas decisiones;
porque acá con sus acciones,
ejemplos de humanos daba. Mt. 20, 17 - 28
Esta vez nos enseñaba Mc. 10, 35
a quien hay que obedecer.
Se tenía que someter
a su padre hasta el final.
Este pedido especial,
no lo podía conceder.
Quien en otro hombre confía
resulta por Dios, maldito. Jr. 17, 5 - 10
Y al contrario, es bendito, Sal. 1
quien lo busca, noche y día.
El buscar a Dios sería,
la mayor seguridad.
Despreciar toda maldad,
para estar bien protegido.
Para el hombre El ha querido,
¡Eterna felicidad! Lc. 16, 19
Previendo su cruel destino
con parábola lo explica
y con esta identifica,
a su futuro asesino. Mt. 21, 33 - 48
A morir por ellos vino Mc. 12, 1
pero ellos lo matarían. Lc. 20, 9
Y con esto le darían
cumplimiento a lo anunciado.
Por haberlos denunciado,
ponerlo preso querían.
Hijo pródigo soy yo,
eres tu y él es también.
A todos nos quiere bien;
¡Por todos igual sufrió! Lc. 15, 1 – 3. 11 - 32
Al pródigo mas le dio,
cuando mas necesitaba.
Porque este, perdido estaba
y ha sido recobrado.
El otro estuvo a su lado
y él, todo se lo daba.
Nosotros somos la higuera
a la que Dios por bondad,
le dio otra oportunidad
para lograr lo que espera. Lc. 13, 1 - 9
Fue preciso que viniera
a nuestro suelo abonar
y su sangre derramar
para vernos producir.
¿Lo dejaremos sufrir
el dolor de fracasar?
Una receta sencilla
manda Eliseo, a Naamán: Lc. 4, 24 - 30
bañarse en el río Jordán;
como la gran maravilla. 2 Re. 5, 1 - 15
Este siente que lo humilla…
Tan poco, tenía que hacer.
El espera merecer,
quizás, algo extraordinario.
Para Dios, es necesario,
solamente obedecer.
El perdón de mi pecado
a Dios le puedo pedir. Mt. 18, 21 - 35
Pero no he de recibir,
lo que al otro, le he negado. Lc. 12, 54 - 59
Cuando por Dios soy amado
al prójimo debo amar.
Con esto he de demostrar
a Dios, mi agradecimiento.
El, que ve mi sentimiento,
quiere verme perdonar.
Con entera voluntad
la ley se debe vivir. Mt. 5, 17 - 19
Cuando se queda en cumplir, Lc. 16,17
se aparta de la verdad. Rom. 3, 31
Debe ser la intimidad;
a un instinto, parecida. Stgo.2, 10
Sin reglas y sin medida.
debe estar en las acciones,
sin veladas intenciones.
Ser intrínseca en la vida.
A Dios debemos dejar
que administre la justicia.
El sabe a quién acaricia,
y a quien debe castigar. Sal. 94
Nuestro modo de pensar
El conoce plenamente.
Sabe qué hay en nuestra mente;
también en el corazón.
Siempre tiene la razón.
Nadie le es indiferente.
Amar a Dios, el primero. Dt. 6, 4
El único, yo diría. Mc. 12, 28- -34
Pues vano mi amor sería,
si a mi prójimo no quiero. Lev. 19, 18
Si le soy a Dios sincero,
mi prójimo viene a ser:
objeto de mi quehacer,
porque este me necesita.
Cuanto Dios, me solicita,
es tan solo obedecer. Mt. 22, 34 - 40
El que grande se ha creído
al final, será humillado.
Quién confiesa su pecado,
¡Por Dios, será enaltecido! Lc.18, 9 - 14
Dios castiga al poseído Pro. 21, 2
porque ha sido cumplidor Mt. 6, 1
de las leyes sin amor,
por lograr la eternidad.
¡Recompensa la humildad!
¡Nadie engaña a mi Señor! Lc. 16, 15
El hijo que está sufriendo
es el que hoy lo necesita. Lc. 15, 11 - 32
Hoy su ayuda solicita
y sin mas, lo está sirviendo.
No está para estar midiendo
el tesoro que ha gastado.
Eso queda en el pasado.
Solo vale: aquí y ahora.
Y lo atiende sin demora…
¡Al perdido, ha recobrado!
Aquel funcionario real
y por supuesto, pagano;
encuentra a su hijo sano,
y recibe una señal. Jn. 4, 43 - 54
Que Jesús venciera el mal, Mt. 8,5
el hombre creyó sin ver. Lc. 7, 1
Cuando decide volver
a encontrar sano a su hijo.
Porque Jesús se lo dijo
y así, tenía que ser.
Su padre, a Dios, ha llamado.
Y su ley, está violando.
En Sábado trabajando…
¿Podía haber mayor pecado?
¡A un inválido ha sanado!
¡Le duele ver padecer!
Y no pueden entender
su total abnegación.
Por su inmensa compasión,
lo vienen a reprender. Jn. 5, 1 – 16
Jesús nos puede juzgar He. 10, 42
porque nos conoce bien.
Siendo hombre, es Dios también, Jn. 5, 17 - 30
que al hombre vino a salvar.
Quien a El, sepa escuchar, Lc. 10, 16
la vida eterna tendrá. Jn. 11, 25
Expedito pasará
de la muerte, a la otra vida 1 Sam. 2, 6
porque ha sido prometida,
¡Y Dios, por El, la dará! Jn. 12, 44 - 50
El antiguo testamento
es anuncio de Jesús.
Hasta su muerte en la cruz, He. 13, 27
nos anuncia en su momento. Jn. 5, 31 - 47
Evangelio, es su argumento.
(Aquí, Jesús, está hablando.)
Las cartas, van recordando
su paso por este mundo.
Quien escudriña profundo, Lc. 24, 27
la verdad, está buscando.
¿No es el que querían matar? Jn. 5, 19
¿No es el que estaban buscando?
Aquí lo tienen hablando
y nada suele pasar. Jn. 7, 1 -2. 10. 25 - 30
Hay un misterio en su actuar.
Lo matarían sin demora.
Pero hay algo que se ignora:
que aunque todo escrito está,
su destino acogerá, Lc. 13, 32
pero El, decide la hora. Jn. 8, 59
El que no tenga pecado,
la primera piedra lance.
Infinito es el alcance,
en lo que hoy, ha sentenciado. Jn. 8, 1 - 11
Nadie quiere ser juzgado,
pero nos gusta juzgar. Mt. 7, 1 - 5
Y queremos castigar
nuestras faltas en los otros. Dt. 22, 22
El comprueba que en nosotros,
estas suelen resaltar.
Los guardias lo respetaron
por la forma como hablaba.
Todo el pueblo lo escuchaba, Mt. 13, 54
Y libre se lo dejaron. Jn. 7, 40 - 53
¿”Porqué, no se lo llevaron”?
Reclaman los fariseos.
Incumplieron sus deseos,
por no encontrar el motivo.
¿” Son del grupo subversivo?
Serán también galileos”?
Cuando les dice: Yo Soy, Ex. 3, 14
está diciendo, que es Dios. Jn. 13, 16 - 20
Es testimonio de dos,
el testimonio que doy. Jn. 8, 21 - 30
De donde vine o me voy,
mi Padre y Yo, lo sabemos.
Nosotros nos conocemos,
o el uno, en el otro está. Jn. 14, 1 - 14
Uno del otro será,
testigo de lo que hacemos.
José es el padre adoptivo. Lc. 1, 27
A Jesús le puso nombre.
Y será el hijo del hombre,
para un especial motivo.
Nos resulta positivo…
¡Dios con nosotros será! Mt. 1, 18- 24
Quien a este mundo vendrá
a enseñarnos a vivir
para poder recibir,
¡La gloria que nos dará! He. 4, 12
No nos basta con creer
debemos perseverar. Gál. 3 - 4
Su palabra debe estar,
adherida a nuestro ser. Jn. 8, 31 - 42
Jesús nos vino a traer
para todos la verdad, Rom. 6, 17
que nos da la libertad.
La libertad del pecado
que mantiene al hombre atado
y lo induce a la maldad. 1 Jn. 3, 8
Yo soy Dios, está diciendo Jn. 1, 1. 1, 30
como Dios, dijo a Moisés. Jn. 8, 51 - 59
Que Jesucristo, Dios es,
ya lo vamos entendiendo.
Aquí se está refiriendo
al decir: no morirá, Jn. 6, 52 - 59
que este jamás sufrirá,
de nuestro Señor, la ausencia.
¡Quien lo escucha, en su presencia,
para siempre vivirá! Jn. 11, 25
La turba a apedrearlo va
por llamarle padre, a Dios Jn. 10, 31 - 42
y declara que los dos,
el uno en el otro está.
Las razones que les da,
no las pueden rebatir
y termina por decir,
que está aquí, por Dios enviado.
Que le digan el pecado,
por el que debe morir
Profetisa en la ocasión,
el sacerdote Caifás.
Que muera uno nada más,
y no toda la nación. Jn. 11, 45 - 56
Y se cumple a perfección
la escritura que decía,
¡Que el cordero, Dios daría,
para el mundo redimir!
¡Y quien tenía que morir,
era el hijo de María!
Cristo trae liberación
que se logra sin violencia. Lc. 19, 28 - 40
Demuestra la diferencia,
su extraña locomoción. Mc. 11, 1
Un burrito, en la ocasión, Mt. 21, 1
humilde cabalgadura. Jn. 12, 12
Una libertad augura,
que resulta individual.
¡Libertad espiritual!
¡Es una paz, que perdura!
Para expresar caridad,
los pobres, siempre tendrán.
A Mi, ya no me verán,
para darme la amistad. Jn. 12, 1 - 11
Esta es su oportunidad. Mt. 26, 6
¡Déjenla hacer por favor! Mc. 14, 1
¡Está derramando amor,
que es la más grande virtud!
¡Es tan bella su actitud,
está ungiendo a su Señor!
Pronto, haz lo que vas a hacer
le dijo Jesús, a Judas. Jn. 13, 21 - 38
Y se borraron las dudas,
que Judas podía tener.
El, lo tenía que vender
porque todo, escrito, estaba. He. 1, 16 - 17
Todo se desarrollaba,
tal como estaba anunciado:
Jesús sería traicionado,
¡Y todo se consumaba!
Cuando Judas preguntó,
conociendo bien su parte:
¿Seré yo, quien va a entregarte?
Tu lo has dicho, contestó. Jn. 13, 21 - 32
Judas no, se lo negó,
aunque estaba arrepentido.
Ya se había comprometido. Mt. 26, 14 - 25
¡Que el perdón Dios le conceda!
¡Por amor a la moneda,
al Señor, había vendido! Mt. 27, 3
Siendo maestro y Señor
les ha lavado los pies. Jn. 13, 1 - 15
Tan solo un ejemplo es,
Del reinado del amor!
Ser de todos servidor, Lc. 22, 27
es lema de su reinado. 1 Jn. 3, 16
Y este ejemplo ha quedado
para quien quiera ser Rey;
que cumpla con esta ley,
que Jesús, nos ha dejado.
El antiguo testamento
en el libro de Isaías Is. 52, 13 - 53, 12
y todas las profecías,
anuncian este momento. Jn. 18, 1 - 19
Conociendo el gran tormento Lc. 22, 47
que en su final esperaba, Hb. 5, 7 - 9
al grupo que lo buscaba, Mt. 26, 47
Yo Soy le dijo valiente. Ex. 3, 14
Llévenme a mi, solamente. Mc. 14, 43
¡A sufrir, dispuesto estaba!
Aquí comienza la historia
de la salvación del hombre. Gen. 1, 1 – 2, 2
Del que a todo puso nombre.
¡Del objeto de la gloria!
Mas sin lucha y sin victoria, Ap. 12, 1 - 18
esta gloria, no se obtiene.
¡Con el amor que nos tiene, Lc. 24, 1 - 12
el Creador envió la luz! Mc. 16, 8
Hoy sabemos que Jesús, Mt. 28, 1
¡Es Dios, que a este mundo viene! Jn. 20, 1